Abri los ojos y me recargue sobre el respaldo de mi asiento, y eso note que Bruno ya no estaba junto a mi, comenze abuscarlo en los demas asientos pero nada, hasta que me di cuenta de donde estaba, mire por la rendijilla que estaba entre los asientos y el estaba junto con Miranda y Melissa jugando con el PSP, en cuanto vio mis ojos regreso al asiento
-Lo siento nena- me dijo y las comisuras de sus labios dibujaron esa torcida risa picara que tanto me gustaba
-Que hora es- le pregunte tallandome los ojos
-No se, han de ser las diez aproximadamente, de hecho ya casi llegamos, asi es que preparate
-De acuerdo le dije y busco mis labios hasta solo rosarlos, sabia que eso me encantaba, senti como levemente el avion descendia, cuando por fin aterrizamos, me levante a trompicones del asiento y baje las escalerillas, la noche era tenebrosa y el frio tibio, la luna iluminaba levemente la autopista, ademas de todos esos faros enormes, Bruno saco las maletas de todos y me ayudo a cargar la mia en lo que encontrabamos el hotel que papa habia reservado para nosotros, tomamos un taxi y le ofreci al chofer una tarjeta con la direccion del hotel, mientras conducia se alcanzaba a ver toda la ciudad, desde los locales que estaban a punto de llegar, hasta los antros que apenas se estaban llenando...
Cuando llegamos al hotel, El chofer ayudo a bajar las maletas y entramos al hotel, era elegante, de eso no cabia la menor duda, la recepcion estaba ilminada con un candelabro de cristal y a las esquinas unas pequeñas lamparitas redondas, me acerque hasta la plataforma y pedi nuestras habitaciones, si, eran, varias, a papa no le agradaba la idea de que pudiera quedarme con Bruno, pero aun asi si lo hacia el no se daria cuenta, uno de los empleados nos ayudo a subir todas las maletas, nuestras habitaciones estaban juntas, cuando entre a la que se supone seria mi habitacion junto con la de alguin mas, y que yo deseaba que ese alguien fuera Bruno me di cuenta que la cama era matrimonial y habia otra individual, habia tambien un grande ventanal con cortinas livianas que se movian onduladamente con el viento, no me contuve y me asome, tenia vista al oceano, la noche se veia apacible, en eso senti a alguien posar su mano levemente sobre mi hombro, me voltee para ver quien era, era Bruno
-Es hermoso, no- me dijo mienras me abrazaba por la cintura
-Si, tenemos la vista mas hermosa- le dije haciendo enfasis en la palabra tenemos
-No creo que el ¨tenemos¨ le haga mucha gracia a tu padre- me dijo utilizando als comillas aereas
-Pero el no se dara cuenta, ademas, solo dormiremos- le aclare
-Lo se- me dijo y solto una risita por lo bajo
Entre al baño y era completamente blanco, con azulejos y una puerta corrediza hacia la regadera, todo era muy lindo. me quite mi sudadera y mi piel se erizo, en eso entre a la habitacion de las chicas, era igual que la mia, ellas comenzaron a desempacar de inmediato y yo las imite y me dirigi a mi habitacion a desempacar al igual que Bruno, cuando terminamos de desempacar me puse mi pijama en el baño, me meti bajo las cobijas y senti como la cama se undio en uno de los lados,, me quite las cobijas de la cara y el se recargo sobre su codo, meacerque y le di un besito tierno, se acosto junto a mi y lo abraze fuertemente, senti bajo la delgadez de su playera, lo bien torneados de sus musculos y lo desse mas que nunca, pero sabia que el se negaria, pero solo por esta noche, el me abrazo y se quedo dormido de inmediato, lo cual hizo desaparecer en un ¨plop¨ mi entusiasmo, me levante y sali al balcon, me gusto el airesito, pedi servicio a la recamara una rebanada de pastel y un moka expresso, llegaron super rapido y me puse mi bata para ir a abrir la puerta, metieron la charola y dejaron todo sobre la mesita de noche, me dispuse a merendar, y cuando termine me fui a dormir...
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